Las TIC en la Organización de Centros Escolares y la comunicación con el entorno.
Los Centros Escolares se van sumando cada vez más al mundo tecnológico. La sociedad educativa está más concienciada de las ventajas que ofrece incluir las nuevas tecnologías a sus proyectos metodológicos.
El libro de texto, frente a otro tipo de material digital, parece obsoleto tras la llegada de la sociedad del conocimiento. La red ofrece un amplio abanico de posibilidades que pone al servicio de la Educación.
Internet está cambiando cómo creamos el conocimiento, esto es, cómo nos comunicamos o cómo accedemos y manipulamos la información. Pero no solo nos ha revolucionado nuestras vidas, sino que también nos ahorra tiempo, en gran parte, tras la posibilidad que nos ofrece para llevar a cabo tareas burocráticas tan necesarias para la sociedad en la que vivimos.
En el ámbito educativo, las TIC, gracias a determinadas aplicaciones web, han allanado el camino para tramitar diferentes actividades de tipo administrativa o de gestión académica como los ya conocidos Delphos y Papas 2.0. Además, estos programas facilitan la comunicación entre la sociedad educativa.
Para llevar una correcta organización, el centro escolar ha de contar, tanto con elementos materiales, como espacios, y recursos escolares, elementos personales como profesores y los alumnos, elementos funcionales como el sistema escolar, elementos complementarios como comedores o actividades extraescolares y espacios de desarrollo tecnológico como el aula de informática, aulas de audiovisuales, PDI o bibliotecas escolares.
La educación ha de apostar por las nuevas tecnologías, ya que estos avances tecnológicos están muy presentes como parte de nuestras vidas.
El estímulo motivador, la creatividad, la interacción, la autonomía que provoca aplicar métodos didácticos basados en las TIC y lo favorecedor que es para la alfabetización digital hacen que las nuevas tecnologías sean tan esenciales para la Educación de la sociedad de la comunicación.
Actualmente, la excesiva rapidez con la que avanza la tecnología, abre el debate sobre si en algún momento de este presente la tecnología sustituirá la figura del maestro. Este miedo, provoca en algunos profesionales de la educación un rechazo absoluto de las TIC. Pero no es este el propósito de estas nuevas metodologías, sino el de crear una nueva estructura funcional. El docente pasaría a ser un guía para los alumnos, él trataría de enseñar a sus alumnos sobre el uso y manejo de las TIC para que ellos desarrollen su alfabetización digital, de manera que los permita navegar de manera segura y crear un espíritu crítico sobre la información que obtengan de la red, y un aprendizaje para toda su vida.
